Raúl Núñez Gálvez
CHILE
El desaparecido Boletín BÚSQUEDA de España en su número Nº 53, publicación pionera en tratar temas ufológicos y creada por el recordado investigador jumillense José María Semitiel en los años 80, incluía el testimonio adjunto de una batalla aérea sobre la población de Viella, la cual fue observada por una pareja de comerciantes.
La descripción estaba basada en el testimonio directo de Irene Gutiérrez quien vio tal portento una noche de verano. Un espectáculo que quedó en su mente para toda su vida. Eran la 1,00 de la madrugada y el cielo estaba totalmente despejado, en algún momento observó un círculo de luz rojizo que avanzaba majestuosamente sobre sus cabezas. Su sorpresa fue mayor al ver que en sentido contrario otro círculo, pero este de color verdoso y mucho más pequeño avanzaba lentamente en sentido contrario al más grande, de color rojizo y ambos círculos se detenían uno frente a otro.
José María Semitiel, en su despacho en la ciudad de Gerona confeccionando el Boletín “Búsqueda”
Su extrañeza ante este inesperado espectáculo nocturno llego a su apogeo cuando vio salir del interior de estas dos luminosidades, pequeñas luces que emitían ráfagas de luces rápidas y que no cabía duda que esta acción era de agresividad además incluía inteligencia en los desplazamientos de estas pequeñas “avispas luminosas”.
Era difícil seguir las evoluciones de estas luces en combate, pero el círculo más pequeño comenzó al cabo de un par de minutos a alejarse del lugar y varias luces que habían salido de su interior volvieron a penetrar en ella. Todo esto ocurría mientras los círculos pequeños que habían salido del gran círculo rojizo proseguían una persecución implacable y lanzando más ráfagas de rayos luminosos a la luz verdosa que se alejaba. La observación duro un poco más de cuatro minutos y al final los círculos pequeños rojos también penetraron al interior del gran círculo rojizo y se alejaron del lugar.
Consultada si había sentido algún ruido, mencionó que creyó “sentir algo” pero no lo asoció a ruido. Sí calificó lo observado como una verdadera “batalla espacial”
Lo que a simple vista parece una broma de mal gusto, o un delirio de una persona en un estado mental descontrolado, nos hace confundir cuando leemos en el periódico El Sol de México quien titula el día 9 de Agosto de 1977 un repórter como ¿Un episodio de la guerra de las galaxias? Refiriéndose a una masa brillante, de tamaño grande y de forma redonda que volaba en línea recta con dos masas pequeñas a ambos lados, que iban haciendo maniobras, al parecer a detener la primera. Añade el periódico que de pronto las masas más pequeñas hicieron un giro de 180 grados y regresaron a una velocidad vertiginosa. Poco después, la masa más grande estalló formándose cuatro objetos que sin embargo sin perder su tamaño original, continuaron su curso dejando una vía luminosa muy ancha. Según El Sol decenas de personas presenciaron la explosión de este extraño aparato volador y añadió que un informe escrito se había enviado a las oficinas de Aeroméxico. En las semanas anteriores en la zona se había observado numerosos avistamientos de Ovnis e incluso un grupo de cineastas habían filmado accidentalmente una escuadrilla de estos ovnis.
Nuestro interés en estas curiosas batallas espaciales de luces de diferentes colores que portan al parecer un objeto luminoso madre, despertó nuestra inquietud y es así como también localizamos otro combate aéreo, esta vez sobre Catalunya, en el año 1604, cuando el filólogo catalán Doctor Casas Homs obtuvo el año 1974 el premio Gumersind Bisbal por su transcripción y estudio de códices inéditos del historiador también catalán Jeroni Pujades, que a partir de 1601 llevó durante 30 años un puntual diario.
Este historiador dejo escrito en lengua catalana un portento de madrugada que se observó en la villa de Pons y que fue observado en toda la zona de Urgell, una gran batalla en el aire de gentes de armas que batallaban con gran fulgor y ruido de armas. Al parecer esta batalla no era muy lejos del suelo y pudo ser escuchado el fragor de la batalla por cientos de trabajadores de la comarca. Aquel día en Barcelona, y sobre el Monasterio de San Jerónimo también se observaron fenómenos luminosos descritos como unos grandes rayos de fuego como barras, muy luminosos. Todo esto ocurría el 30 de Septiembre de 1604 y quedaba registrado por el erudito historiador Jeroni Pujades quien describía estos avistamientos en su diario de la siguiente forma:
Dietari El jueves, a 30 de septiembre de 1604, día de San Jerónimo fue muy portentoso por diversas cosas prodigiosas que se vieron en diversas partes de Cataluña. Porque en la mañana ya clara, en la villa de Pons o cerca de ella, en la zona de las Belianas, todo el obispado de Urgel, se vieron en el aire pero muy bajos, cerca del suelo, grandes escuadrones de gente de armas que batallaban con gran furor y ruido de armas. Y los primeros que descubrieron esto fueron unos que trabajaban en una esclusa y acabaron en la villa de Pons de donde salió gran multitud de gente que vieron dicho portento.
Igualmente esa misma mañana desde la ciudad de Barcelona y sobre ella, viniendo de la costa de levante y tirando a la parte de poniente se vieron pasar en el aire un […] o ramo de pájaros parecidos a estorninos, los cuales eran del grosor y negror de unos cuerpos, pero de muchas piernas y alas como de langosta.
Igualmente, en la noche los de tierra descubrían sobre el monasterio de San Jerónimo de la Vall d'Hebrón unos grandes rayos de fuego como a barras, muy clareando, y los de la mar vieron más allá. En fin, todos los que las vieron lo hicieron a la vuelta de la tramontana. Dios por su misericordia nos castigue según nuestros pecados.
En este mes de septiembre han perseverado las mismas enfermedades del mes de agosto recién pasado.
Este acontecimiento nos hace retroceder tres años a Núremberg (Alemania) pues al atardecer del 14 de abril de 1561 sucedió un hecho similar, el cual quedo registrado en una octavilla elaborada en madera en 1566 por el artista Hans Glaser quien describe y gráfica, con cierta ingenuidad pictórica, dicho inusual evento. Dicha representación se conserva en la colección Wickiana, en la biblioteca central (Zentralbibliotel) de Zúrich.
Una forma temprana de periódico conocido como un "aviso de noticias", que describe el fenómeno aéreo que sucedió en los cielos de Núremberg el 4 de abril de 1561
Relata la nueva de una «muy horripilante aparición» en el momento de la salida del sol, el 14 de abril de 1561, que fue vista «por muchas personas, varones y mujeres». Eran «esferas» de color rojo sangre, azulado y negro, o «discos anulares», cerca del sol, «tres por ejemplo en fila / a veces cuatro en cuadrado, y también algunas solas / y también se han visto entre esas esferas algunas cruces de color sangre». Había también «dos grandes tubos» (o tres)... «En cuales pequeños y grandes tubos / estaban de a tres / también de a cuatro y más esferas. Y todos ellos comenzaron a pelearse entre sí».
El fenómeno duró aproximadamente una hora, luego «todo ello como ofuscado por el sol / cayó a la tierra desde el cielo como si todo ardiera / y con gran vapor desapareció poco a poco sobre la tierra». También se vio, bajo las esferas, una figura alargada, «igual que una gran lanza negra». Naturalmente, esta «visión» se entendió como advertencia divina.
EN CHILE TAMBIÉN
Nuestra incredulidad lógicamente fue en aumento. La experiencia nos muestra que algunos enigmas nos parecen simples o malas interpretaciones de testigos supersticiosos, falta de coherencia en los testigos o simplemente humoradas que nunca faltan, sin embargo no logramos ocultar nuestra sorpresa cuando recibimos entre la gran cantidad de testimonios que nos llegan a diario por nuestros medios de comunicación en Chile, las siguientes líneas y que una vez más queremos compartir con usted. Una lectora del Sur de Chile nos escribió lo siguiente:
Me encontraba en el sector realizando un proyecto de la Fundación Prodemu para la cual trabajaba...en casa de la familia Morales. Nos habíamos reunido alrededor de 14 mujeres que realizarían un taller con la monitora Lorena Nelson diseñadora industrial de profesión, en el lugar se encontraban otros miembros de la familia, más un funcionario del Fosis. Alrededor de las 15 horas me retiro del lugar en un vehículo hacia Futaleufu, dejando al grupo trabajando con la monitora. Cerca de las 16 horas regresan al pueblo la monitora con Marcela Morales hija de la dueña de casa e integrante del taller, y esto es lo que narraron.....
A los gritos de un arriero que cabalgaba hacia la casa (hijo de la familia Morales) salió todo el grupo al exterior para ver qué pasaba, grande fue el asombro de todos al ver un objeto lenticular de color plateado del tamaño aproximado a un vehículo pequeño que era perseguido por otro objeto triangular de un color gris oscuro, aproximadamente 10 veces más grande que el primer ovni,.... la primera impresión fue creer que había guerra con Argentina...las otras personas que no eran del sector se dieron cuenta que lo que pasaba no era normal.....después de unos minutos de persecución y evasión, del objeto triangular salía algo parecido a unos pequeños fogonazos de luz, que dieron en medio del objeto pequeño lenticular...se produjo algo así como una vibración y el pequeño objeto se vio envuelto en una especie de nube o humo negro que se absorbió a sí mismo y a la pequeña nave ( tengo entendido que ha esto le llaman implosión). No se dieron cuenta en qué momento desapareció la nave triangular... De este caso existen cerca de 20 testigos oculares....Cuando las dos mujeres narraron los hechos me encontraba con un controlador aéreo de aeronáutica de Chile que se encontraba a cargo ( subrogando ) de la estación de aeronáutica....Se consulto al aeródromo si se habían detectado o habría algún vuelo en esa zona.....nada de nada... hice personalmente las consultas a Puerto Montt y también a Esquer (Argentina)...resultado en ese sector no había pasado ningún avión o similares en el día en cuestión.
Firmado: Drinka Bradanovick Braniff)
Este hecho ocurrió el año 2000 en el sur de Chile. Específicamente en un sector denominado "noroeste" a cinco minutos (en vehículo) de la pequeña ciudad de Futaleufu en la Provincia de Palena. Este lugar se encuentra en la frontera con Argentina. (Por esta razón la acotación de la testigo quien menciona que pensó una posibilidad de guerra con el país vecino, pues cada cierto tiempo las relaciones entre estos dos países no son las mejores).
MÁS BATALLAS AÉREAS EXTRAÑAS
Agosto, año 1914: Batalla de Mons, en Bélgica. El Ejército inglés y su aliado el Ejército francés contra los alemanes. El 29 de Septiembre de ese año el periódico London Evening News público un relato del célebre autor Arthur Machen llamado The Bowmen (Los arqueros) en el que se explicaba que el ejército en retirada (los aliados británicos y franceses) habían sido salvados por la intervención de San Jorge y un ejército espectral. La cuestión fue que miles de militares ingleses, desde oficiales a soldados rasos, juraron después que efectivamente habían aparecido tropas fantasmas; arqueros, coraceros, y caballería que con la ayuda de los ángeles y espesas nubes de humo los había salvados de los teutones.
A pesar que el autor de este relato, Arthur Machen pensó que sin querer había inspirado alucinaciones colectivas a los soldados posteriormente a la batalla, se comprobó que los soldados que ofrecieron testimonios no tenían idea del escrito de Machen.
BATALLAS ESPECTRALES
Durante el siglo XVI hubo múltiples reportes de batallas espectrales que en general fueron explicadas por los historiadores como fruto del fervor religioso imperante. Según consta en una crónica de 1686 en Cydeside, Escocia, hubo lluvia de bonetes, sombreros, armas, y otros implementos militares, que cubrieron los árboles y todo el terreno circundante sin que se vieran quienes las arrojaban. Al mismo tiempo se advirtió la marcha de compañías completas de soldados por el borde del río. En pleno siglo XIX, rodeados del más puro racionalismo, muchos cientos de testigos atestiguaron incidentes similares en la propia Escocia. El recopilador de estos hechos malditos. William Holmes (La brujería en la historia británica), culpa de todo a la exaltación religiosa, aunque no explica cómo la pura exaltación fue capaz de crear cuerpos sólidos como espadas y otras cosas.
El siglo XVII es pródigo en libros y folletos que describen más cruentas batallas en los cielos. Para los escépticos el asunto era sencillo de explicar: truenos y tormentas eléctricas. Esta explicación simplista no dejaba conforme a muchas personas quienes pensaban que el mero disturbio atmosférico no puede producir visiones tan complicadas como las de artilleros peleando en las nubes. Y, aunque algunos estragos producidos – según testigos – de la batalla podrían atribuir a los efectos de rayos y centellas, resulta un tanto difícil explicar la enorme piedra que cayó del cielo el martes, cuarto día de Agosto, a las cinco del reloj, después del mediodía, en Ayre en Aldborow, Aldebrug, en el condado de Suffolke. La caída de la piedra, quizá para dar al acontecimiento los debidos honores, fue acompañada de batir de tambores, descarga de mosquetes y considerable estruendo de artillería. Según la crónica que hacemos alusión el sol lucía en todo su esplendor y no había ninguna señal de tormenta.
En México también ha quedado para la posterioridad “ejércitos espectrales o batallas en los cielos” Nos referiremos a una que tuvo su aparición durante un combate en el año 1520. Ocurrió en el estado de Querétaro, lugar donde se libró una batalla decisiva que puso fin al poderío otomí. Fue una batalla peculiar pues no se portaban armas y el enfrentamiento fue a “mano limpia” En estas condiciones un otomí ladino llamado Fernando de Tapia acordó con los caciques y capitanes españoles que se luchara sin armas, a fin de evitar derramamiento de sangre y que la contienda durara hasta que el agotamiento anulara a los combatientes.
La batalla está registrada el día 25 de Julio de 1520 y después de once horas de combate, en el momento decisivo, se escuchó un estruendo en el cielo y desde arriba llegó una gran luminosidad ultraterrena. Según las cartas de relación enviadas al Rey Carlos V en la luz se vio una especie de jinete precedido por una gran cruz luminosa, que dejo a los indígenas inutilizados para la lucha. En recuerdo de este hecho singular el rey autorizó que en el estudio de Querétaro apareciera el apóstol Santiago y el Sol con una cruz y unos árboles. No cabe duda que el hecho y la batalla arriba detallado dejo huellas históricas que permanecen hasta el día de hoy.
Los países árabes tampoco se libran de estos testimonios, es así como nuestro banner de portada, anunciando este trabajo, muestra un antiguo cuadro que ilustra un espectáculo contemplado por miles de personas. En el cielo, sobre la tumba de Mahoma, una mujer radiante hace huir un ejército musulmán. La visión duro 27 días y fue consignada en el año 1620 en el libro “Buenas nuevas de la cristiandad”
Podríamos presentar cientos de “avistamientos” similares, pero hemos elegido esta desconcertante representación de un objeto volador avistado en Arabia en el año 1479 y mencionado por Karl Wolffaahart en sus añadidos a la obra original de Obsequens* La semejanza con un misil actual es evidente. Nótese sobre el objeto tres apocalípticas guadañas. La memoria nos hace recordar no sólo la referencia a estas batallas aéreas inexplicables, sino también una tecnología de guerra superior a la época que nos muestran muchas representaciones antiguas, siendo las más recurridas las descripciones bíblicas y de libros sagrados de la antigua India, como el Mahabharata.
LA BATALLA DE LEPANTO.
En fecha 7 de Octubre de 1571 se dio una batalla entre el Islam y la Cristiandad, el triunfo de la liga cristiana sobre la flota turca trajo consigo cambios radicales sociales, y religiosos en Occidente. En los registros de un religioso de nombre Alberto Gaglielmotti, historiador oficial de la marina pontificia relata el siguiente episodio:
La víspera del 21 de Septiembre en la noche, pareció en el cielo una señal que todos creyeron prodigiosa. El cielo estaba sereno, soplaba un viento frío del norte y las estrellas lucían claras y brillantes, cuando de pronto – explica el padre Gaglielmotti sobre la base de lo referido por los testigos oculares- apareció en el aire una antorcha grande y reluciente, en forma de columna que todos contemplaron con maravilla durante largo tiempo… los presentes vieron en aquella aparición un feliz augurio de una victoria segura….
Aunque teniendo en cuenta fuegos fatuos, fenómenos eléctricos inusuales en la atmosfera, las luces de Santelmo, los globos de fuego y las vigas ardientes como la descrita, nos deja lógicamente pensando que la angustia y la fe desbordada muchas veces tienen que haber tenido algo que ver en estas crónicas antiguas que hoy nos llama la atención. Unas más documentadas que otras, pero siempre presentes a través de nuestra historia en todas partes de nuestro planeta.
Nuestra recopilación no termina, todo lo contrario, tenemos cientos de casos similares, y nuestro país no escapa a estas situaciones. Existe documentación de los “reporteros” coloniales, sacerdotes y escribanos de la conquista, sobre hechos anómalos que ocurren justamente en batallas importantes entre españoles y mapuches. La llamada Batalla de Andalien fue un encuentro militar sucedido el 22 de febrero de 1550 entre las fuerzas españolas de Pedro de Valdivia y las mapuches del toqui Ainavillo y dejó entre otras situaciones extrañas, la aparición de personajes celestiales dejándose ver en momentos claves de la lucha. Sucesos que de una forma u otra, de orígenes inciertos, seguramente de acusadas religiosidades y supersticiones han quedado hasta nuestros tiempos. Nos adentraremos en próximos trabajos en estos sucesos de nuestro país y que estamos seguros quedarán en vuestras memorias, al igual como impresionaron a nuestros antepasados.
NOTA EXPLICATORIA
(*) Julio Obsequens historiador romano autor de El libro de los prodigios, libro donde recoge descripciones de avistamientos y fenómenos aéreos insólitos, extraídos de obras originales de la época romana.
BIBLIOGRAFÍA A CONSULTAR:
- Libro de los prodigios de Julio Obsequens
- Fenómeno Ovni – Volumen 3 – 1979
- Mundo Desconocido
- Diari – Any 1609 – Jeroni Pujades
- Crónica Universal del Principado de Cataluña, Año 1609
- Archivos IIEE de Chile
- Archivos Luis Altamirano
Fuente: iiee
